Texto y fotografías María Laura Romboli
El pasado sábado, Omar Dris y La Montaña eligieron realizar un concierto en el Teatro Mendoza. Una noche verdaderamente especial que combinó temas nuevos como clásicos que cautivaron a su público a lo largo de años.
Aquel que conoce un poco a Omar Dris sabe que es uno de los artistas más completos que la música nos puede dar. Dris fue cantante de bandas de rock a finales de los años 90 siendo una de ellas La Montaña, que se disolvió en su momento de mayor éxito. Además, Omar Dris se toma muy en serio la preparación de sus presentaciones, y esa noche en particular no fue la excepción. Durante meses estuvo trabajando, pensando, creando y ensayando para poder mostrar su arte de manera completa en el escenario.
A 30 años después de la última presentación de la mítica banda, esas canciones volvieron a sonar en vivo en el Teatro Mendoza el pasado sábado 14 de octubre.
Tal como había prometido, la primera parte del concierto titulado «La muerte está viva” incluyó canciones nuevas con un contenido sistémico y conceptual que Dris crea, escribe y compone. Él disfruta de este proceso creativo y también disfruta compartiéndolo con su público. Con su potente voz y su presencia en el escenario, Dris logró cautivar a la audiencia. Fue acompañado por Willy Martínez en la guitarra y producción, Walther Daine en la batería y Max «Darkmanbas» en el bajo y producción, además de una participación especial de Jimena Semiz.
En la segunda parte del concierto, de manera natural y esperada, comenzaron a unirse los miembros de la emblemática banda mendocina «La Montaña». Aparecieron Joe Moya, Fredi Pacheco y Silvia Mechulan para dar rienda suelta a la nostalgia que tal vez muchos sentían.
Con una gran cantidad de músicos reconocidos del ámbito del rock local entre el público, el teatro se llenó con los mejores sonidos de una de las bandas que nunca serán olvidadas. Siempre será un placer estar en el lugar y en la fecha que Omar Dris elija para volver a tocar.